Fiel reflejo de una sociedad Argentina, colmada de fracazos y medias tintas, donde nadie se compromete ni califica con notas verdaderas la estupidez humana, pero como dice el viejo refrán..."la culpa no es del chancho sino de quien le da de comer", y aquí en este querido país los medios de comunicación, de toda índole, son culpables del vedettismo exagerado de los jugadores de foot-ball.
No tienen sangre en las venas sino por el contrario DOLARES en sus billeteras, si muchos dólares mientras se sigue muriendo nuestro pueblo de hambre y los niños son violados y asesinados, prostituidos y maltratados, mientras los comunicadores sociales en su versión nefasta de periodistas deportivos, llenan hojas y hojas, y minutos y minutos de aire radial y televisivo diciendo BOLUDECES.
Este es el país de la boludez, para muestra miren la cúpula presidencial, del narigón y de la yegua.
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