Cada día se vuelve más cruda la vida, día a día, los golpes en la puerta se repiten..."señor/a tiene algo para dar", en las esquinas se repiten sin solución de continuidad la presencia de malabaristas y limpiavidrios, rasguñando el sustento diario, para la comida ó para algo peor. Día a día mi ciudad sangra por las heridas que les a provocado esta democrácia mal entendida, y en algunos casos mal intencionada, abusiva y extorsionadora del que menos tiene, cómplices indirectos de la angustia de una sociedad de consumo agónica.
Disfrutamos los bienes materiales sin ver, o no queriendo ver lo que realmente nos está pasando.
La Iglesia critíca, condena pero entre sus filas sigue teniendo nefastos personajes, contadores, abogados, políticos, que" tragan ostias y cagan diablos ", creyendo que de esta forma salvarán sus almas, mientras que pecan de soberbios, creyendosé mejores que los demás.
La muerte tiene el mismo emboltorio para todos, la fría mortaja es blanca para pobres y ricos, que nos llevamos si tan solo dejamos desolación y angustias...Sigo triste mañana seguramente estaré peor...mañana tendré más dolor que hoy, y las ideas más claras para escribir en extenso una simple sensación.
2 comentarios:
Sí, ya lo dijo alguien, a veces buscamos la vida después de la muerte y nos olvidamos de buscar la vida, para todos claro, antes de la muerte...
Venga anda Mario, que el mundo no lo hiciste tú, aquí tampoco van las cosas como nos gustarían...
Venga un abrazo
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